miércoles, 24 de noviembre de 2010

DEDICADO A CHUS C.B.



Me duermo a la orilla de un abismo
de esquivas agujas de acero,
donde sólo el horizonte espera su amanecer.
A un sólo paso de quebrar los sedientos huesos,
de romper  tendones sueltos
y cortar los sangrantes sucios mechones.
Y brotarán las piedras donde antes
lo hacían las fuentes
y ahogarás la lengua en agrios ácidos,
que te irán quemando lentamente
dentro de mi, hasta que no tengas
más dolor que el que yo  sufro.

.

2 comentarios:

  1. Puro fuego trágico ¡Maravillosa! Podría haber pintado un infierno de dolor y rabia con palabras similares en tiempos pasados, pero afortunadamente ya sólo redacto trabajos académicos ¿Puedo pensar en un influjo estilístico?
    Malesherbes

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  2. Este poema está dedicado al devenir de la vida de una mujer. Para mí la influencia está sólo en el propio relato verbal de ella misma. Revierto en mi lenguaje toda la carga emocional de su interior.

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