jueves, 24 de septiembre de 2009

Me han tragado sin masticarme apenas

Vomitas lo que no masticas,
lo que no saboreas,
lo que no aprecia tu frustrado gusto.
Voracidad material,
que atraganta al espiritu.
Ansiedad psicópata,
que no le duele el dolor del prójimo.
Avaricia letal,
que se alimenta de casi inertes cuerpos
cuya voluntad ya fue aniquilada.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Buscamos un olor con los ojos cerrados
que deja la memoria volar al recuerdo,
mas frágil es ésta pues sólo nos devuelve
aromas de niño, fragancias de azahar,
esencias y efímeros efluvios.
Tu no me hueles a lo ya conocido,
sólo disfrazas levemente con lavanda
el cansado cazador que ha andado
ya mucho camino, ya mucha vereda.
Pavorosamente gritan las neuronas
cuando la llamada del aullador se oye lejana
Esa naturaleza brava y constante que,
como vegetación espesa,
cierra sentidos, paraliza sentimientos
y deja que la mirada se vuelva.
Como la enfermedad que encuentra el banquete
en los seres débiles y faltos de energía,
y así como el deseo se establece en el cuerpo nervioso,
que anhela ser acariciado,
aparece la garra que encuentra el objeto presto de su pulsión.
Es devenir no creador, es agotamiento,
que deja inerte el espíritu en un volver al deceso
para intentar llegar al nacimiento
de una nueva idea, de un nuevo poema ....
Acabado y empezado, así ...

miércoles, 16 de septiembre de 2009

TRITONES

"Sobre los tritones, los pescadores aseguran que no tienen una idea clara ni prueba evidente de su existencia, pero corre la leyenda muy difundida de que en el mar existen, ciertamente, algunos monstruos antropomorfos desde la cabeza a la cintura.
Dice Demóstrato, en su tratado sobre la pesca, que vio en Tanagra un tritón en conserva. Y añade que era semejante, en muchos aspectos, a los representados en estatuas y pinturas, pero su cabeza estaba tan estropeada por el tiempo y era tan borrosa, que no era fácil distinguirla y reconocerlas."

Historia de los animales
Claudio Eliano


domingo, 13 de septiembre de 2009

René Descartes

"El bien que hemos hecho nos da una satisfacción interior, que es la más dulce de todas las pasiones".
"Dos cosas contribuyen a avanzar: ir más deprisa que los otros o ir por el buen camino".

MUSAS

Despiertan y acuerdan
las musas tercas y arpías,
que nunca dejan de murmurar.
Ellas buscan y encuentran
jirones de almas rotas
para coser a sus alas.
Ellas traman y urden
tropelías inmunes a la justicia.
Ellas sólo descansan
en los oscuros huecos
de los abandonados huesos.
Ellas te buscan,
ellas te encuentran.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

NARCISO Y PSICÓPATA

El relato más conocido del mito de Narciso es el de Ovidio, de su tercer libro de Las Metamorfosis del año 43 AC. La tragedia comienza a gestarse ya desde la concepción del niño Narciso, puesto que él es producto de la violencia sexual. El dios-río Cefiso, después de raptar y violar a la náyade Liriope, engendró en ella a un joven de espléndida belleza, a quien dieron por nombre Narciso. Preguntado sobre si el recién nacido tendría una larga vida, Tiresias, el sabio capaz de predecir el futuro, contestó cripticamente «Sí, siempre y cuando nunca se conozca a sí mismo.»
A lo largo de su vida, Narciso, va a provocar en hombres y mujeres, mortales y dioses, grandes pasiones, a las cuales no responde por su incapacidad para amar y para reconocer al otro. Según el relato de Ovidio, entre las jóvenes heridas por su amor estaba la ninfa Eco, quien había disgustado a Hera y por ello ésta le había condenado a repetir las últimas palabras de todo cuánto se le dijera. Eco fue, por tanto, incapaz de hablarle a Narciso de su amor por él, pero un día, cuando él estaba caminando por el bosque, acabó apartándose de sus compañeros. Cuando Narciso preguntó «¿Hay alguien aquí?», Eco contenta respondió: «Aquí, aquí». Incapaz de verla oculta entre los árboles, él le gritó: «¡Ven!». Después de responder: «Ven, ven», Eco salió de entre los árboles con los brazos abiertos. Narciso cruelmente se negó a aceptar su amor. Tentado por Afrodita, al contemplar su imagen en el espejo de la superficie del agua, sintió una fascinación por su propia imagen de la que no pudo sustraerse. No podía tocar ni abrazar al ser que veía reflejado en el agua, pero tampoco podía apartar su vista de él. En otra versión del mito, uno de los menospreciados por Narciso se queja a los dioses y Némesis, la diosa de la venganza, se encarga de castigar su orgullo.
De cualquier modo, Narciso, subyugado por la bella imagen de sí mismo que le devolvía el río, se retrajo de toda posible relación amorosa con otros seres, e incluso de atender sus propias necesidades básicas, y su cuerpo se fue consumiendo para terminar convertido en la flor narciso, una flor tan hermosa como maloliente. Mientras tanto, Eco, consumida de melancolía, se retiró a una cueva donde su cuerpo también se consumió, quedando de ella solo una voz sin forma que repite, en la lejanía, la última frase o sílaba que se pronuncie.
Rasgos de la personalidad narcisista
La personalidad narcisista se caracteriza por un patrón grandioso de vida, este se expresa en fantasías o modos de conducta que incapacitan al individuo para ver al otro. Su visión de las cosas es el patrón al cual el mundo debe someterse. Para los narcisistas el mundo se guía y debe obedecer a sus propios puntos de vista, los cuales considera irrebatibles, infalibles, auto-generados. Las cosas más obvias y corrientes, si se le ocurren a él o ella, deben ser vistas con admiración y se emborracha en la expresión de las mismas. Hay en el Narcisista una inagotable sed de admiración y adulación. Esta necesidad lo incapacita para poder reflexionar tranquilamente y valorar serenamente la realidad. Vive más preocupado por su actuación, en cuanto al efecto teatral y reconocimiento externo de sus acciones, que en la eficacia real y utilidad de las mismas. En resumen, las personas narcisistas, aún cuando pueden poseer una aguda inteligencia, esta se haya obnubilada por esa visión grandiosa de sí mismo y por su hambre de reconocimiento. Llama la atención, entonces, cómo muchas personas pudiendo ser exitosas, productivas y creativas, someten su vida a aduladoras mediocridades. Cuando los narcisistas ejercen posiciones de poder, se rodean de personas, que por su propia condición, son inferiores a él o ella, y de otros, que le harán la corte solo en función de un interés mezquino. Ellas, drogadas por su discurso auto-dirigido, no son capaces de reflexionar y escuchar lo que el mundo externo les grita.
En la otra cara de la moneda, la personalidad narcisista es, en sí misma, una forma de supervivencia. Hemos visto en el mito como Narciso es el producto de una acción terrible. La personalidad narcisista nace de una violencia, de un terrible trauma, de una herida inferida al individuo en sus primeras etapas del desarrollo o antes, cuando la herida es la madre y ella trasmite al hijo su resentimiento, su dolor, su rabia y su temor. Se refugia, el traumatizado, en su propia imagen de grandiosidad, ello le permite elevar su maltrecha auto-estima y sentirse un poco mejor consigo mismo. Su hambre insaciable de reconocimiento se asila en la admiración y la adulación de quienes lo circundan.
El narcisista es una persona que puede ser muy exitoso, en cuanto al brillo externo se refiere. Él no se plantea dudas en cuanto a la realidad de sus ideas, sean estas brillantes o no. Así vemos como personas con una inteligencia mediocre y una cultura pobre, escalan posiciones sorprendentes, para ellos el recapacitar no existe. Aún las más insulsas ideas son expresadas con un espíritu mesiánico, se enamoran de las ideas de otros y las hacen propias sin la más mínima consideración moral ni ética. Estos últimos logran capitalizar a una horda de Narcisistas depresivos que creen, ingenuamente, en la verdad expresada por el pseudo-maestro. Ellos lo seguirán fielmente, no importa cuán errado esté:
"Sobre la pena duermo solo y uno, pena es mi paz y pena mi batalla, perro que ni me deja ni se calla, siempre a su dueño fiel pero importuno."
escribe Miguel Hernández, retratando esta suerte de personalidad del narcisista depresivo, siempre fiel, signada por la tristeza derrotada, que busca, con más ahínco que éxito, alguien en quién creer, alguien en quien confiar el remedio a sus miserias. De estas melancólicas soledades esperanzadas se nutre el Narcisismo. La simbiosis se completa con la satisfacción a medias, con un hueco de hambre y sed, que nunca se llega a colmar.
El recurso de la mitología nos brinda la imagen para la comprensión de la conducta y el mito de Narciso es concluyente en la terrible frase del oráculo: "El niño tendrá larga vida si nunca se observe a sí mismo." Así en la no reflexión es donde puede sobrevivir este personaje. Sin embargo, Narciso, en castigo a su ser desalmado, es transformado en una planta que da unas flores muy bellas, de olor nauseabundo, y estéril de fruto y nos dice el mito que en este tipo de personas hay, a pesar de su apariencia, algo que huele muy mal.

domingo, 23 de agosto de 2009

Respira silencio

Mi palabra anhela salir de la garganta
cuando hay experiencia y pensamiento sensible
y cuando percibo un mundo humano
que logra en mí un significado interior.
Es cuando la palabra hace eco.
Y callo para que el silencio
traiga al alma músicas, colores y formas.
Y lo busco para que argumentos y reflexiones afloren.
Vertebro mi nuevo ser,
que se transforma día a día
con su combinatorio juego de silencios y palabras.



domingo, 9 de agosto de 2009

Y ya no cultivaré más tu jardín,
pues las lluvias ya no llegan
a esta tierra seca y triste.
Cierra esa cancela y tira la llave
que el tren pasa y no hay andén.
Es el andar inútil de tus pisadas
cuya huella no se dibuja;
es tu ansioso aliento de soledad
el que no deja vaho en mi ventana;
es tu ensimismado silencio
que, frente a tu negro espejo,
busca sólo su propia imagen.

sábado, 6 de junio de 2009

DAFNE

"El hombre que ha sabido pintar los rasgos transparentes de Natacha o de Ana, parece, a simple vista, un agudo conocedor del carácter femenino. Sin embargo, los hombres y las mujeres somos distintos. Nosotros las necesitamos porque no sabemos amar sin ellas. Pero ellas aman el amor, se enamoran del amor, juegan al amor. Son como los astros, que cambian de color cuando pasan delante del Sol. Por eso sólo las hacemos felices cuando no pretendemos ser amados por ellas y las dejamos jugar a su amor. O quizás es que los hombres nos creemos cuadrados, rojos y azules, pero somos estechos y gris claro ...."

Así, Wiesenthal define a Tolstoi "uno de los más bellos personajes que ha dado el alma rusa, más contradictorio que Dostoievski, tan apasionado como Pushkin, tan humano como Gógol".


Al leer a Tolstoi se siente el torrente de cada frase girar en torno del ser que quiere describir.Escribe en la sensación de puntear un bordado de letras y ofrece el apresto necesario para que sea consistente. Leerlo da sensación de ligereza y de camino que se hace "allegro".


jueves, 28 de mayo de 2009

LAS CORRESPONDENCIAS VIRTUALES


"Concédame aunque sea un poquito de ese resplandor. Déjeme envidiarla. Saber envidiar lo que es bueno es mi única cualidad (...)"

Cuando encontré "Correspondencia" de Tolstoi en la biblioteca ya sabía que su lectura iba a ser muy gratificante. Sabía que se habían conservado más de 10.000 y que Acantilado publicaría una mínima parte. Pero las escogidas son toda una delicia para la vista. Entre ellas destaco las cartas de amor que escribió a Valeria Arsénieva y a su esposa Sofia Bers. Ahora ya es difícil encontrar alguien que escriba con ese nivel. En la actualidad ya no se escriben cartas de amor: sólo se chatea cuando se quiere hablar de .... "amor". Una vuelta por los chats descorazona a una persona que sea una enamorada del lenguaje, de las letras y del juego verbal . Banalidades, faltas ortográficas por doquier, estructuras sintácticas sin orden ni concierto, ... Absolutamente penoso. Y ¿así se pretende "enamorar", por decir algo, en este siglo XXI?, o ¿es que el concepto de amor tal como lo conociamos ha cambiado?

Recordé las primeras cartas de amor que recibí hace ya años y, fueron tan hermosas, que todavía las conservo. No era Tolstoi quien me escribía pero, en comparación, con lo que ahora se escribe en la virtualidad del tiempo, es lo que más se asemeja.

Un aviso a los navegantes: sois un tostonazo y no un tolstoiazo.

miércoles, 13 de mayo de 2009


MIS MANOS

Busco los harapos miserables que la vida

fue dejando tras nuestros pasos.


Y en mis manos ya son retazos

que se deshilacharon al aliento de mi boca.
Quizás los suaves tejidos no quisieron

dejar que el peso de nuestras manos
quitaran las minúsculas motas

de amor que allí se depositaron.

Me dejo caer, libremente,

sobre un triste lecho sin calor alguno

y mis ojos miran a lo alto, sin detenerse.

Sólo azul ... sólo un breve blanco...


martes, 5 de mayo de 2009

ACIDO SULFÚRICO

Hace años, cuando la telerealidad no era el plato habitual de nuestras horas muertas, esta novela no hubiera tenido mucho más calado de lo habitual buscando paralelismos con la situación vivida en un campo de concentración cualquiera e, incluso, sería tildada de ciencia ficción.
Hoy ya no es ciencia ficción sino realidad pura sobre la insustancia proporcionada por lo que se supone un medio para distraernos. Muy recomendable para reflexionar en nuestro papel de televidentes-teleadictos, de cómo la intimidad se convierte en extimidad y de cómo ya hemos perdido la vergüenza y hablamos de todo y de todos, sin conocimiento y, lo peor de todo, sin respeto.

lunes, 27 de abril de 2009

23 DE ABRIL

EL MUNDO DE AYER. Memorias de un europeo.
El día del libro fue una excelente oportunidad para comprar este libro. Ya llevaba detrás de mi sombra buena cantidad de tiempo y decidí que ya era hora. Es una buena muestra del conocimiento de esa Europa en la que vivió y rezuma melancolía por cada página. Para mí Zweig es una delicia melancólica. Gracias a que me regalaron un libro de él, empecé a renovar mi espíritu lector. Me ha gustado muchísimo como biógrafo, como ensayista y como novelista. Toda una invitación a seguir línea a línea como si caminasemos por un sendero.

martes, 21 de abril de 2009

EN EL PAÍS DE LOS DIOSES


Lafcadio Hearn también era griego -por lo menos de nacimiento- pero acabó siendo un japonés en el inicio del siglo XX. Es un autor al cual llegué a través de Sweig y con curiosidad indagué sobre él y su obra. Acantilado nos ofrece constantemente deliciosas obras que nos permiten descubrir escritores semiocultos. Hearn nos trajo Japón y su cultura a Occidente y quien quiera sumergirse en su encanto debe empezar buscando referencias en él.

MUERTE EN ESTAMBUL

Quien tenga la oportunidad de ir a Estambul, como mi compañera y amiga Carmen, le recomiendo que la lea antes o durante su viaje. Es una estupenda guía monumental artística, gastronómica,... pero sin duda alguna es una guía que enmarca las relaciones sociales entre los griegos y los turcos, tanto en esta época como en el díficil pasado de la minoría griega en ese territorio. Es la vida de éstos la que da movimiento a esta novela que se orquesta a través de un "sencillo" caso para el inspector Kostas Jaritos.
Petro Markaris merece la pena ser leído y seguido.

sábado, 4 de abril de 2009

ROSENGGER

Uno va leyendo "El legado de Europa" de Sweig y se va dando cuenta lo afortunado que es al tener delante de los ojos a un autor inteligente, ávido lector, apasionado en la pluma y tan sereno en el tratamiento de cada uno de los personajes que hace desfilar por estas páginas. Como biógrafo no tiene rival, por supuesto. Transmite el fondo, la forma y el aura de cada personaje. Disfruta relatándonos sus entresijos, sus vulnerabilidades y sus destrezas. Ha sido un placer que todavía no he acabado porque no quiero que lo haga. He aquí unos de sus poemas favoritos de Rosenger, escritor austriaco.



Lo que la tierra me prestó
me lo reclama ya ahora,
se acerca para arrancarme pieza a pieza
suavemente del cuerpo.
Cuanto más yo sufría
Más bello el mundo se hacía.
Extrañamente cuanto yo conquisté
se me cae poco a poco de la mano.
Cuanto más ligero me hago
Tanto más pesado me siento.
“¿No puedes tú, tierra rica,
prescindir de mí?” te pregunto.
“No, de ti prescindir no puedo,
de ti tengo que construir otro,
contigo a otro he de alimentar,
con derecho a contemplar el mundo.
¡Pero consuélate en paz!
El otro también eres tú.

Rosengger
Petri Kettenfeir

martes, 24 de marzo de 2009

UN ASESINATO PIADOSO


J. M. Guelbenzu


Guelbenzu sigue trabajando en el personaje de Mariana de Marco, juez de una ciudad del norte, tanto en su vida personal como profesional. A mí, que me encanta el género de la novela negra, precisamente no me "encantó". Razones diversas atribuyo a esta falta de atracción: la trama podría salvarse pero no está bien entretejida y no resuelve porque no existe la tensión que caracterizaría a una obra de este género. Además, su marco geográfico -que es indudablemente Gijón- por supuesto no pertenece a Cantabria como él nos quiere hacer creer. Y con eso ya dije todo. Sería deseable que no fuera tan piadoso.

MENDEL, EL DE LOS LIBROS


"Precisamente yo, que debía saber que los libros sólo se escriben para, por encima del propio aliento, unir a los seres humanos, y así defendernos frente al inexorable reverso de toda existencia: la fugacidad y el olvido"

Autor: Stefan Sweig

Obra: Mendel, el de los libros.


Pequeño libro delicatessen. Como un café, caliente e intenso. Permite una o varias reflexiones dependiendo del surco de la vida de cada uno o del propio recorrido del mismo. Si es en un principio, la opción será biográfica, y si es en el final la memoria volverá a nosotros intentando recordar nuestra propia experiencia. Sin ser duro no será blando para nuestro sentimiento. Reconocer la finitud de nuestra propia creencia de infinitud es la clave.

martes, 10 de marzo de 2009

Bloom y su no canon




El canon, una vez lo consideremos como la relación de un lector y el escritor individual y nos olvidemos de él como lista de libros, será idéntico a un Arte de la Memoria literario. Se ha convertido en una elección entre textos que compiten para sobrevivir y, al parecer, no es muy inteligente que se defienda como la encarnación de virtudes morales, que se suponen que puedan componer nuestros valores normativos y principios democráticos. La razón estriba en que los escritores occidentales más excelsos subvierten todos esos valores.
Realmente, leer a Shakespeare no nos va a hacer mejores ni peores, sólo nos puede enseñar a oírnos cuando hablamos con nosotros mismos.
Otros de los puntos importantes en Bloom es la crítica que hace a las instituciones intelectuales, culturales, académicas… Afirma que se están destruyendo todos los criterios intelectuales y estéticos de las humanidades y de las ciencias sociales en nombre de la justicia social. El aprendizaje esta siendo devaluado porque se considera irrelevante. El canon occidental pretende imponer límites, establecer un patrón de medida que no sea ni político ni moral, sin tener como objetivo incrementar las élites sociales preexistentes sino para que la persona encuentre el verdadero poder y autoridad estéticos.
También afirma que, a pesar de llevar una vida de lectura y reelectura es imposible recorrerlo dado que nadie tiene autoridad para precisarlo. A ello lleva el definir la mortalidad o inmortalidad de las obras literarias y sólo puede afirmar que Shakespeare es absoluto.

Harold Bloom, su autor, es el supercrítico supercriticado. Ha sido profesor de literatura en Harvard y en la actualidad ejerce como catedrático de Humanidades en Yale y de Literatura inglesa en Nueva York. Es ensayista y uno de los más importantes críticos de EE.UU. Merecedor del premio de la Academia Americana de Artes y Letras. No se encuentran comentarios en la red que estén de acuerdo con él pero, aún así, suele ser una referencia de peso por su erudición y dedicación al mundo literario.

Su libro Cómo leer y por qué es un repaso de las mejores obras clásicas de la historia de la literatura en los últimos 200 años y nos aporta una explicación detallada y concisa sobre los aspectos más relevantes que cada una de éstas y motivandonos a su lectura. De todas formas, no voy a ser menos, le criticaría su excesiva tendencia a lo anglosajón en detrimento absoluto de las letras hispanas.
No resulta indiferente y se aprende mucho si se quiere. Nadie puede obligar a seguir una directriz en un gusto pero, para poder hacerle frente a este autor, es obligado tener un buen nivel y exigirse mucho a uno mismo y a todo lo que caiga entre las manos. Es un reto no estar de acuerdo con buenos argumentos y no sólo con vagas opiniones. Leer a fondo a Milton, Dante, Shakespeare, ... requiere tiempo, meditación, soledad y paciencia. Factores que, actualmente, pocos pueden tener a su disposición. Tener un criterio requiere tiempo y madurez; las prisas en este negocio no dan ganancia en un corto plazo y el recorrido es ... , a pesar de Bloom, largo.