Al finalizar el día, cuando los espíritus se serenan y las tareas declinan, comienza el momento de recuperar fuerzas y momentos claves del devenir que supuso la jornada. Reflexiones personales sobre las cosas que pasan aquí y ahí, en el exterior y en el interior. La palabra necesita del corazón para que sea inteligente: necesita palpitar y sentirse viva.
jueves, 24 de octubre de 2013
VICTORIA (1819-1901)
Conseguida esta edición en una librería de segunda mano, 3,50 euros , un chollo. Se lee de un tirón y, entre anécdota e historia, un par de horas de entretenimiento seguro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario